Habiendo demostrado la existencia de conjuntos con las mismas y diferentes potencias, Cantor continuó este concepto de potencia de un conjunto e introdujo una teoría de números cardinales y ordinales en la que los cardinales transfinitos y ordinales son los elementos llamativos. Cantor desarrolló este trabajo en el Mathematische Annalen, en artículos de 1879 a 1884 bajo el titulo Sobre Agragaciones Lineales Infinitas de Puntos.
Señala que su teoría de números transfinitos o infinitos es diferente del concepto de infinito donde se habla de una variable tendiendo a ser infinitamente pequeña o grande.
Para conjuntos finitos el número cardinal es el número usual de objetos del conjunto. Para conjuntos infinitos se introducen nuevos números cardinales.
El número cardinal de un conjunto de números enteros lo nota como
. Puesto que los números reales no pueden ponerse en
correspondencia uno a uno con los enteros, el conjunto de los números
reales debe tener otro número cardinal que nota por
.
Si dos conjuntos M y N son tales que N puede ponerse en correspondencia
uno a uno con un subconjunto de M, pero no M con uno de N, el número
cardinal de M es mayor que el de N. Por lo tanto
.
Para obtener un número cardinal mayor que uno dado, consideramos cualquier conjunto M que representa al segundo número cardinal y consideramos el conjunto N de las partes de M; Cantor probó que suponer que hay una correspondencia uno a uno entre los elementos m de M y N nos lleva a una contradicción. Luego
Cantor también define la suma, el producto y la potencia de números cardinales.
Cantor llama la atención sobre el hecho de que su teoría de números cardinales se aplica en particular a cardinales finitos, y así da el más natural, corto y riguroso fundamento para la teoría de números finitos.
El siguiente concepto es el de número ordinal;
Dos conjuntos ordenados son equivalentes si hay una correspondencia
uno a uno entre ellos y si, cuando corresponde a
y
a
y
, entonces
. Como
ejemplos de conjuntos ordenados, podemos usar cualquier conjunto finito
de números en cualquier orden dado. Para un conjunto finito, no importa
cual sea el orden el número ordinal y el símbolo que puede tomarse
como el número cardinal del conjunto de números en el conjunto es
el mismo. El número ordinal del conjunto de enteros positivos en su
orden natural se nota por
. Por otro lado el conjunto de enteros
positivos en orden decreciente .....4, 3, 2, 1, se nota por
.
El conjunto de enteros positivos y negativos y el cero en el orden
usual tiene el número ordinal
.
Cantor define la suma y multiplicación de números ordinales. Luego introduce el conjunto completo de ordinales transfinitos, para definir con precisión los números cardinales transfinitos más altos. Para introducir estos nuevos ordinales restringe los conjuntos ordenados a los conjuntos bien ordenados.
Hay una jerarquía de números ordinales y cardinales. En la primera
clase notada por están los ordinales finitos 1, 2, 3,...
En la segunda clase
están los ordinales
,
,
,...,
,
,...,
,
,...,
,
,...,
,....
Cada uno de estos ordinales es el ordinal de un conjunto cuyo número
cardinal es
.
El conjunto de ordinales en tiene un número cardinal. El
conjunto no es numerable y así Cantor introduce un nuevo número cardinal
como el número cardinal del conjunto
. Se demuestra
que es el siguiente cardinal después de
.
Los ordinales de la tercera clase son
,
,
, ...,
,... Estos son los números ordinales
de conjuntos bien ordenados. Cada uno de los cuales tiene
elementos. En cualquier caso, conjuntos de ordinales
tienen
más de
elementos y Cantor notó el número cardinal de
este conjunto por
. Esta jerarquía de ordinales y cardinales
se puede continuar indefinidamente.
Paco Villegas